Seguidores

miércoles, 17 de septiembre de 2008

Síntomas de cansancio muestran maestras en ayuno y los sindicatos independientes no acuden a su llamado

José Luis Jara

Las maestras de preescolar cumplen hoy su sexto día en huelga de hambre.

Ana Karina Sánchez, una de las huelguistas, empezó a sentir calambres en uno de sus brazos. La noche del grito tuvo que ser trasladada el Hospital General porque se le bajó la presión.

Pero en cuanto la estabilizaron, decidió retornar a su puesto de lucha, frente a palacio de gobierno, donde se encuentran también en ayuno desde el viernes pasado las profesoras María Guadalupe Ortega y Ángeles Guzmán.

Fue en la noche del grito, donde la gente que acudió a escuchar el grito de dolores y contemplar los juegos pirotécnicos, resultó ser una fuerte presión para estas maestras que se negaron a abandonar la plaza Zaragoza, a pesar de que se celebraría la noche del grito.

Se quedaron en un breve espacio en la plaza Zaragoza, bajo el custodio de unos diez policías, que las rodearon durante las horas que duró la fiesta.

Dentro de palacio de gobierno, se celebró con noche de gala el supuesto aniversario de la independencia de México. Se brindó con los mejores vinos y se cenó con costosos platillos.

Fuera de palacio, la gente esperó la hora de los fuegos artificiales. Es el tiempo en que el patriotismo de la gente se mide con una noche colorida, unos tacos de carne asada y unas cervezas bien heladas.

En medio de ese tumulto, se sostuvieron las profesoras que están en huelga de hambre. Su demanda de reinstalación en sus plazas no entra en el vocabulario de las fiestas patrias. Por ello las sometieron bajo presión para que desalojaran la plaza.

Les fijaron primero un plazo hasta las cinco de la mañana del lunes 15. Las maestras lo rechazaron. Luego les volvieron a poner otro plazo, a las seis de la tarde de ese mismo día. Pero las maestras se aferraron y ahí se quedaron, con huelga de hambre y unas mantas con mensajes de denuncia, en la fiesta patria que se celebró en la capital del estado.

Sin embargo, la presión de la multitud que si bien no acudió a la plaza para manifestarse en contra de ellas, pero tampoco a su favor, si melló en las maestras, pues sumado a los días de ayuno que llevaban, provocó que a una de ellas la tuvieron que trasladar en una ambulancia de la Cruz Roja.

Fue a la maestra Ana Karina, que empezó a sentir que se desfallecía porque se le bajó la presión. Los calambres en sus extremidades fue lo insoportable para ella que aceptó el traslado al Hospital General.

Pero una vez estabilizada por los médicos, Ana Karina retornó a su trinchera, a seguir en una lucha donde demandan la reinstalación en sus plazas.

Sin embargo, las respuestas de la Secretaría de Educación y Cultura han sido peor que la de una sepultura.

Pero ellas decidieron seguir con su ayuno, a pesar de que en su sexto día en huelga de hambre, no tengan un médico que las atienda, que las asesore en sus cuidados.

Las maestras hicieron un llamado a las organizaciones sociales y sindicales para que las apoyen. Concretamente en ese llamado subrayaron los nombres de los sindicatos universitarios, de los telefonistas, del seguro social, porque saben que son los gremios que apoyan las causas laborales que ellas demandan.

Sin embargo, los dirigentes sindicales de estos gremios no han acudido a ese llamado de solidaridad. Al parecer aprovecharon el puente para desaparecer del escenario donde las maestras de preescolar están luchando.

lunes, 8 de septiembre de 2008

Denuncian maestras de preescolar en ayuno: Hostigan a sus familiares

José Luis Jara

En el cuarto día de ayunos parciales, las maestras de preescolar despedidas de la SEC denunciaron un operativo de hostigamiento que empezaron a sufrir sus familiares, a quienes presionan para que obliguen a sus hijas a renunciar al movimiento que ahora tienen frente a palacio de gobierno.

La profesora Fabiola Espinoza Lagarda dijo: “soy de Empalme y mi familia empezó a recibir amenazas por parte del delegado sindical del SNTE. Le llamaron a mi mamá (Evelina Lagarda) para que fuera a una cita con unos funcionarios de la secretaría y del sindicato donde le ofrecieron un interinato para mí.
Le dijeron que me saliera del movimiento porque así no nos van a dar nada”.

Testimonios como este, fueron relatados al reportero en los momentos en que acudieron a palacio de gobierno unos funcionarios de la secretaría de educación y dirigentes de la sección 28 del SNTE.

Los citaron de la subsecretaría A de Gobierno y acudieron el secretario particular de Ismael Valdez, Julián Valenzuela como representante de la dirección de educación básica de la sección 28 del SNTE, el subsecretario de educación, ingeniero Curiel, Jorge Rascón, subsecretario de educación básica, Agustín Juárez, quienes se reunieron en la subsecretaria de gobierno.
En tanto, el dirigente del FADES, David Guadalupe Valenzuela denunció que el trabajo de amedrentamiento a los familiares de las maestras despedidas, se ha realizado en ciudad Obregón, Empalme, Navojoa, Álamos Vícam, aquí en Hermosillo.
Dijo que son representantes del SNTE quienes realizan esta tarea y las profesoras lo están tomando como amenazas.

Denunció que es Oswaldo Bojórquez el que coordina este operativo.
Cuando el profesor Valenzuela informaba de este maestro del SNTE, el propio Oswaldo Bojórquez salía de palacio de gobierno.
Había concluido la reunión y pasó a un lado de las maestras y se aprovechó su paso para preguntarle:

-Profesor, las maestras de preescolar lo denuncian por hostigar a sus familiares.

El profesor se quedó mudo. No quiso responder.

-Profesor, las maestras denuncian a Oswaldo Bojórquez como quien coordina el hostigamiento a sus familiares. ¿Usted es Oswaldo Bojórquez?
-Sí.
-Lo señalan y por eso le pregunto sobre la denuncia.

El profesor volvió hacer mutis y se fue caminando por la plaza Zaragoza.

Por el otro extremo de la plaza salieron los funcionarios de la SEC que participaron en la reunión. Y las maestras de inmediato se pusieron de píe para empezar a gritar repetidamente la consigna de “¡Mi plaza no se vende, mi plaza no se da, mi plaza se defiende con mucha dignidad!”

En tanto, la profesora María de los Ángeles Guzmán dijo que es de Navojoa y que del viernes hasta ayer, en su casa han recibido seis visitas. “Primero fue un maestro que me dio clases en la secundaria. No me acordaba de él. Iba acompañado de la profesora Lupita Barrera del SNTE en Navojoa, quien les dejo un ultimátum a mis padres, para que dejara el movimiento”.

La profesora Edna Ortega Salazar, de Ciudad Obregón, denunció que el sábado a las cinco de la tarde fueron a su casa para advertirles a sus padres que si continuaba en el movimiento me iba a quedar sin nada.

A decir del profesor Valenzuela, no se ha registrado avance en las negociaciones. Las maestras iniciaron un periodo de ayunos parciales y están decididas a entrar a una huelga de hambre esta misma semana.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Anuncian huelga de hambre maestras despedidas


José Luis Jara

Las maestras de preescolar que fueron despedidas por la Secretaría de Educación y Cultura tomaron la determinación de iniciar un ayuno parcial para este día a las nueve de la mañana.

Advirtieron que si la secretaría de educación y el gobernador del estado no respetan sus derechos laborales, el lunes iniciarán una huelga de hambre frente a palacio de gobierno.

Todos los días, el grupo de profesoras de preescolar despedidas, se reúnen frente a palacio de gobierno, porque el mismo gobernador comisionó a un funcionario para que intercediera en la solución del conflicto.

Y todos los días, las maestras, entre las que se encuentran dos embarazadas, buscan un encuentro con el gobernador, cada que entra o sale de palacio de gobierno.
Ayer no fue la excepción. Cuando Eduardo Bours salió de su oficina después de atender la visita que le hizo la ex alcaldesa de Hermosillo, la panista María Dolores del Río, el gobernador tuvo que enfrentar a las profesoras que se sienten agredidas en sus derechos laborales.

En cuanto salió el gobernador, las maestras corrieron hacia él portando las mantas elaboradas para reclamar el respeto a sus derechos laborales.
Igual como siempre, los guardias del gobernador se encargaron de evitar que cualquiera de las maestras llegara a tener contacto con el mandatario.

El profesor David Guadalupe Valenzuela, dirigente del Fadesa, organismo magisterial disidente que salió en defensa de las maestras, dijo que hubo un diálogo entre funcionarios del gobierno estatal con funcionarios de la SEC, donde participaron el subsecretario de operación educativa, representantes de la sección 28 del SNTE, y un representante del nivel educativo de preescolar.
Lo que alcanzaron a detectar es que en esas reuniones participó el principal operador político de la secretaría de educación, Francisco Curiel, quien no había aparecido en el escenario.

El profesor Valenzuela señaló que el punto fundamental de las maestras es que se les reconozcan sus derechos adquiridos, porque ya tienen desde uno a 10 años ocupando sus plazas.

“Partimos –abundó- de que se reconozca la antigüedad en la plaza, el derecho preferencial que tienen”.
Indicó que las profesoras de preescolar tomaron la determinación de que si no hay respeto a sus derechos, hoy a las nueve de la mañana iniciarán un ayuno alternado entre las maestras.
Cinco profesoras ayunarán 24 horas, luego entrarán otras cinco. Y si para el lunes no hay una respuesta clara, entrarán a otra etapa más fuerte, con una huelga de hambre total.

Después de tres semanas del plantón que han emprendido, las maestras de preescolar sólo han obtenido respuestas sumamente parciales, explicaron, porque únicamente han ofrecido dos plazas de interinatos, para las maestras que se encuentran embarazadas.

El ofrecimiento es irrisorio –dijo el dirigente del FADES-, porque no resuelve el problema de fondo.
Sólo quieren quitarse el peso social que implica despedir a maestras embarazadas, pero de una manera temporal, porque no les ofrecen la plaza, sino un interinato”.

martes, 2 de septiembre de 2008

Sufre amenaza de aborto porque SEC le quitó su plaza

José Luis Jara

Desde el 24 de agosto de 2005 la profesora Celida Noemí Miranda Morales tuvo la notificación de que tendrá una plaza de educadora y que supuestamente entraría en vigor el 1 de septiembre de ese mismo año.
Seguramente, la entonces directora de educación preescolar de la Secretaría de Educación y Cultura, Esthela Núñez Toledo, debió conocer que la profesora Miranda tendría plaza como maestra de preescolar en una escuela de Nogales, pues ella fue la que firmó ese oficio cuyo número fue 0186/2004-05.

Y seguramente el entonces subsecretario de operación educativa, el dirigente de la sección 28 del SNTE, la jefatura del sector 009 y el supervisor escolar XXXVI, también se dieron por enterado porque el oficio que mostró la profesora señala que a estas instancias les giraron copia del documento.

Pensaba que ya tenía trabajo seguro y se embarcó con una casa que adquirió a través del Fovissste.

A partir de entonces, empezó a planear su vida como esposa. Sólo le faltaba dar el siguiente paso con su marido: empezar a darle forma a su familia y prepararse para tener hijos, de tal suerte que en la actualidad tiene tres meses de embarazo.

Sin embargo, la historia de la profesora Miranda tuvo un descarrilamiento con la entrada en vigor del acuerdo nacional para la educación, porque se enteró que la plaza que ya le habían entregado, la secretaría de educación la puso a concurso para que la ocupara quien resultara idónea en el examen que aplicó hace unas semanas.
Entonces reflexionó que de nada le había servido haber llevado un curso para la gasificación.
Fue un curso que recibió durante un mes en una escuela técnica de Hermosillo. Con ello, supuestamente quedaba allanado el camino para que ocupara la plaza que le habían asignado en ese oficio autorizado por la SEC.

A pesar de ello, la profesora Miranda tomó la determinación de participar en el examen de la SEC, porque no se quería dar por vencida y perder un trabajo que ya tenía ganado.

Se preparó para participar en ese concurso, pero la vida de la institución le asestó otro golpe, porque antes del 11 de agosto, día en que supuestamente iba a presentarse al examen, recibió un correo electrónico donde le notificaron que ella no cumplía con el perfil que se requería para ocupar esa plaza.

La desilusión se le vino encima.
El coraje también se le mezcló en su sencillez humana y fue cuando tomó la determinación de defender sus derechos.

Con tres meses de embarazo, la profesora se encontró que no era la única que sufría esta jugarreta en los caminos de su vida.
Fueron más de 400 maestras, que al igual que ella, fueron despojadas de una plaza que ya tenían asignada.
Son maestras de educación preescolar que trabajaban en escuelas ubicadas en diferentes partes de la entidad.
La mayoría de ellas madres de familia, con hijos y que ellas son parte fundamental del sustento de sus hogares.
Pero eso no le importó a quienes se encargan de aplicar los planes de gobierno, pues ellos son funcionarios que sólo firman documentos, sin importarles nada, porque en el momento en que ellos quieran, pueden borrar con el codo lo que firman con la mano.
La profesora Miranda mostró ese oficio y permitió sacarle una copia. En el momento de la entrevista, frente a palacio de gobierno, esperaban una respuesta de parte de un funcionario que nombró el gobernador para atender el caso de las docentes que les quitaron la plaza.

Recordó que cuando decidió venir a Hermosillo para hablar con los funcionarios de la SEC sobre su problema, se encontró que también se encontraban otras profesoras que le hicieron la misma jugada.

Se dieron cuenta de que los funcionarios con quienes estaban dialogando, los trataban como si fueran arrimados, ajenos a la vida educativa, es decir peor que a un maestro desempleado.

Entonces las profesoras decidieron unirse y empezar a pedir el apoyo de diferentes organizaciones. Decidieron establecerse en un plantón en la secretaría de educación y empezaron a movilizarse.

La profesora Miranda ya cargaba en su vientre un germen de humanidad con tres meses de desarrollo.

Pero eso no les importó a los funcionarios, porque la siguieron tratando como si fuera un peligro para la institución.
La maestra y el resto de las docentes afectadas, empezaron a buscar el diálogo.
Platicaron con los funcionarios y se encontraron con los oídos sordos de burócratas que sólo cumplen las órdenes de sus superiores.
Fueron a platicar con otros maestros para que las apoyaran, fueron con los dirigentes del sindicato y ellos les dijeron que no podían hacer nada “porque sus demandas se encuentran fuera del presupuesto”.

Hasta que llegaron con los maestros disidentes, agrupados en el Frente Amplio Democrático de Sonora (FADES), quienes se pusieron a la cabeza de la demanda.

Y con ese paso, las negociaciones se empezaron a acalorar.
Todo ello lo resintió la humanidad de la profesora Miranda. La presión que le implicaron las reuniones, la preocupación y el estrés por el peligro de perder su plaza de un plumazo, hicieron mella en la maestra.
Empezó a sentir un dolorcito en su vientre, que se fue intensificando en la medida que pasaban los días y las tensiones.

Hasta que se percató que su embarazo estaba en riesgo, decidió acudir al Hospital de la Mujer, donde le diagnosticaron una amenaza de aborto.

La doctora que la atendió le recetó unos supositorios para disminuir ese riesgo y le recomendó una misión imposible para la maestra: tener reposo cuando ella siente el peligro de perder su empleo, perder la casa y quedarse en la calle con su familia y un hijo que está por venir.